Después de tres años de lucha vecinal, la plataforma Stop Tanatori del barrio barcelonés de Sants ha conseguido la urbanización de la plaza Can Climent, considerada un espacio verde desde hace cuatro décadas, pero que hasta hace muy poco era un parking de motos infrautilizado. A pesar de que el ayuntamiento haya accedido en la urbanización de la zona, Stop Tanatori advierte que no aceptará esto como moneda de cambio del tanatorio que la funeraria San Ricardo SL está construyendo a la antigua fábrica de los Hermanos Climent que hay en la misma plaza.
La plataforma, que ha llevado al tanatorio a los juzgados, mantiene que el proyecto incumple normativas urbanísticas y asegura que la ubicación no es la adecuada y que la actividad es incompatible con el entorno, una zona residencial con escuelas. En conversación con EL TRIANGLE, desde Stop Tanatori recuerdan que “son tres años de lucha, en que todo ha sido uno ‘no’ como respuesta”, y señalan que las demandas vecinales sobre la plaza Can Climent y las relacionadas con el tanatorio “son reivindicaciones totalmente diferentes”. El consistorio tiene “la obligación moral de respetar no solo el interés de una empresa privada, sino el de los vecinos con quienes también se ha reunido”, apuntan desde la plataforma.
La urbanización de Can Climent responde al proyecto que los vecinos presentaron, y diferencia la plaza en tres áreas: una zona de descanso, con gradas, bancos y jardineras; una zona deportiva, con tres mesas de ping-pong, media pista de baloncesto y media pista de fútbol; y una zona infantil con juegos pintados en el suelo con el espacio suficiente para el escenario que habitualmente instalan los Castellers de Sants, por ejemplo, durante la fiesta mayor. “Está pensado para las necesidades de todo el mundo: los niños pequeños, la gente mayor, los jóvenes. Está hecho con el espíritu de ser un espacio público abierto a todo el mundo y al servicio de la ciudadanía”, explican desde Stop Tanatori, que destacan que es un espacio “muy versátil”.
La plataforma también ha revelado que, después de un año pidiéndolo, han conseguido un compromiso escrito firmado por todos los portavoces de los grupos municipales del distrito de Sants-Montjuic –excepto Valents– para que se permita al vecindario continuar haciendo actividades de ocio en Can Climent a pesar de la presencia del tanatorio. “El distrito afirma que siempre tendremos permiso para continuar haciendo las actividades que habitualmente se llevan a cabo en la plaza –calçotades, fiesta mayor, etc.– pero las palabras se las lleva el viento. Lo queríamos por escrito y que fuera consensuado con todos los partidos políticos para que, gobierne quién gobierne, se respete”, explican.
“Estrategia de desgaste” contra los vecinos
Stop Tanatori presentó una demanda contra el Plan Especial Urbanístico Integral (PEUI), que posibilita el proyecto, y otra contra la licencia de obras concedida por el Ayuntamiento de Barcelona, sobre las cuales todavía no se ha dictado sentencia. La plataforma vecinal señala que el proceso “se está alargando más de lo que nos gustaría” y explican que, más allá de los tempos judiciales, las partes –el consistorio, la funeraria y la propiedad de la nave de los Hermanos Climent– “agotan” los plazos.
“Tenemos clarísimo que esto puede formar parte de una estrategia de desgaste del ayuntamiento”, afirman desde Stop Tanatori, que consideran que “el consistorio nunca se habría llegado a imaginar que seríamos tan insistentes y tozudos en continuar defendiendo los argumentos contra el tanatorio”. “Es una lucha de David contra Goliat, pero los vecinos tenemos la voluntad de plantar cara ante esta situación”, afirman.
