Los payeses de Girona prevén mantener el corte de la AP-7 y la N-II hasta que tengan «respuesta política» a sus demandas. El portavoz del sindicato Unió de Pagesos y del movimiento Revolta Pagesa, Jordi Ginebreda, ha asegurado que la decisión está tomada y que no se moverán hasta que reciban «una llamada» donde la administración se comprometa a «asumir su responsabilidad y a empezar a poner facilidades al sector». De momento, ya tienen prevista la comida de este miércoles -harán fideuá- y ya están pensando en la cena. A estas alturas, centenares de personas continúan a pie de la vía desayunando y recogiendo las tiendas que han usado para dormir.
«Hasta que no haya esta llamada no haremos asamblea», ha asegurado Ginebreda. De momento, mantienen los tractores en la vía, han talado varios árboles y están amontonando restos que ayer se tiraron fuera de la autopista -neumáticos y plásticos- para continuar poniendo barreras e impedir que los puedan desalojar. También van llegando nuevos tractores que han vuelto a sus explotaciones a primera hora y que ahora retomarán las movilizaciones. «Los que se han ido ya están volviendo para aguantar lo que haga falta», afirma Ginebreda.
El miembro de Plataforma Pagesa Josep Vall-Llosera ha afirmado que hay «mucha unión en el sector» y que entre los concentrados hay «desde grandes industriales a pequeños productores». «Esto quiere decir que algo pasa y que afecta a todo el mundo», ha añadido.
