Junts se ha abierto a estudiar a la propuesta del PSC para eliminar las pensiones vitalicias de los expresidentes del Parlamento catalán si «va en el sentido de racionalizar la institución». Así se ha expresado el portavoz del partido, Josep Rius, preguntado por la propuesta de reforma de ley que han registrado este lunes los socialistas. «Cualquier reforma de este tema se tiene que abordar desde el consenso y con el objetivo de prestigiar a la institución», ha remarcado Rius, exigiendo un debate «serio» y «riguroso» al respecto.
Ahora bien, los de Junts han insinuado que con esta iniciativa el PSC «intenta desviar la atención» después de haber aprobado los presupuestos del Govern haciendo de «muleta» del presidente de la Generalitat, Pere Aragonès. Así, Rius ve cierto «oportunismo político» por parte del partido de Salvador Illa y ha avisado: «Si (la reforma) es ad hoc, no nos encontrarán».
La reforma afectaría a cinco expresidentes vivos: Joan Rigol, Ernest Benach, Nuria de Gispert, Carme Forcadell y Roger Torrent. En el caso de la presidenta del Parlament suspendida y líder de Junts, Laura Borràs, justo el 12 de marzo se han cumplido dos años de su presidencia, pero está suspendida desde el julio pasado. Así pues, con la actual ley podría estar en cuestión si tiene derecho a la pensión vitalicia, puesto que requiere un mínimo de dos años en el cargo.
Los socialistas quieren eliminar las pensiones vitalicias a la presidencia de la cámara, reducir los importes y limitarlos a seis meses. La ley actual del 1988, modificada el 2003, prevé que cuando un presidente abandona el cargo cobre el 80% del sueldo durante la mitad del tiempo que lo ha ejercido o un mínimo de cuatro años. Los socialistas proponen que sea del 20% y durante 6 meses. En el caso de la jubilación, a partir de los 65 años ahora cobran una pensión vitalicia del 60% si han ejercido un mínimo de dos años, y el PSC quiere que sea un 10% durante seis meses.
