El cartel de la octava edición de la Feria de la República Catalana, un evento que vuelve a celebrarse este 11 de marzo en Torrelameu (la Noguera), ha provocado befas de no independentistas y desencanto entre algunos independentistas. Los motivos van desde el diseño, evocador de una época pasada de la informática y menos cuidado que el de ediciones anteriores, a las actividades propuestas.
Salvador Clarà, miembro de la asamblea del Consell de la República, ha sido particularmente exigente: «Una Feria seria enseñaría a tener una wallet digital, explicaría cómo un Estado de origen digital y descentralizado significa que con IA nunca más deberíamos hacer ningún trámite, o explicaría que una renta de país todo el mundo la necesitará, porque el trabajo de nómina desaparece. De arquitectos a notarios, de funcionarios a gestores… Llegará la Doctrina del Shock que aprovecharán para el control de cada uno (sic)».
Nada de eso se refleja en el cartel, donde se anuncia, eso sí, que la mediática escritora Empar Moliner inaugurará la feria, que actuará el músico Lo Pau de Ponts, que el payaso -y hasta hace poco vicepresidente de la ANC- Jordi Pessarrodona apadrinará la elevación de los «farolillos por la libertad» y que la clausura será un espectáculo del Mag Lari.
El evento lo promueven el CDR local, Òmnium Cultural, la ANC, la Asociación Catalana por los Derechos Civiles y el Ayuntamiento de Torrelameu.
