La plataforma ecologista Salvem la Platja de Pals (Baix Empordà) denuncia que el Ayuntamiento haya concedido una licencia de obras en un paraje natural. En concreto, se trata de una duna continental fijada con pino piñonero y de unos 30 metros de altura, que forma parte del Hábitat de Interés Comunitario Prioritario, y donde está previsto construir un edificio plurifamiliar con 18 pisos.
El portavoz de Salvem la Platja de Pals, Pau Bosch, detalla que «son los últimos pinares sobre dunas en Cataluña» y también «únicos en la Península». El alcalde de Pals, Carles Pi, justifica la decisión argumentando que «el otorgamiento de licencias urbanísticas es un acto reglado y, si se reúnen los requisitos, el Ayuntamiento está obligado a otorgarlas». El promotor ya ha iniciado las obras.
Las entidades ecologistas Salvem la Platja de Pals y SOS Costa Brava denuncian que el Plan de Ordenación Urbanística Municipal (POUM) de Pals, aprobado en el 1986 y uno de los más antiguos de Cataluña, «no tiene las garantías medioambientales suficientes» para mantener como «suelo urbano y urbanizable» algunos parajes naturales del municipio. El portavoz de Salvem la Platja de Pals explica que «toda esta planificación no ha pasado por una evaluación ambiental» y está convencido de que «el Ayuntamiento está atrasando la redacción del nuevo POUM, porque no la superaría».
Por su parte, el alcalde de Pals se defiende y asegura que «en ningún caso el Ayuntamiento está atrasado intencionadamente la tramitación del nuevo POUM». Detalla que en el 2017 la Comisión Territorial de Urbanismo de Girona (CTU) acordó que habría que aprobar inicialmente por segunda vez el POUM (redactado el 2015) y someter a una nueva información pública y en el 2019 la misma Comisión suspendió la tramitación de figuras de planeamiento. El plan vigente continúa teniendo casi 40 años.
