El expresidente de la Generalitat y exlíder de Convergència Artur Mas ha manifestado este miércoles que «dejar vacante la presidencia del Parlament no es una buena decisión«, en referencia a que Laura Borràs haya conservado el cargo, pese a estar suspendida por la misma cámara para ejercerlo, desde que la enviaron a juicio por el caso de los contratos de la Institución de las Letras Catalanas (ILC).
En declaraciones a Catalunya Ràdio, Mas ha afirmado sobre el caso de Borràs que las instituciones «más allá de la situación de una persona a título individual, están por encima de las personas», y ha recordado que en su caso él renunció a volver a ser investido presidente de la Generalitat en 2016, frente a la negativa de la CUP, porque «no tenía salida».
Por otra parte, ha dicho que el caso de los contratos de la ILC puede ser el de una «potencial falta administrativa», pero que si Borràs «no fuera quien es», no habría ido a juicio. Según él, no se ha juzgado a nadie con la misma severidad que a la líder de Junts por los mismos hechos, sobre los que ha indicado que constituyen una «práctica bastante habitual en el conjunto de las administraciones públicas».
