Un juzgado de Barcelona ha avalado un tratamiento contra la covid que no tiene evidencia científica. Se trata de la ozonoterapia, que no está autorizada ni por las agencias reguladoras ni tampoco incluida dentro de los protocolos del Servicio Catalán de la Salud.
El Departamento de Salud se pone las manos a la cabeza y avisa que recurrirá la sentencia, porque lo considera «injerencia sobre las evaluaciones clínicas de los profesionales». Los equipos jurídicos del departamento trabajan para imponer alegaciones contra esta decisión.
No es la primera vez que un juez avala esta terapia. Un magistrado de Castellón ya lo hizo hace pocos días, aunque también tenía la oposición de los médicos, y el argumento que alegan los jueces es que la familia lo ha pedido.
Salud encuentra que todo es un disparate y recuerda que la ozonoterapia puede presentar efectos secundarios tales como dificultad respiratoria, tos o inflamaciones de los conductos sanguíneos. En un comunicado, apunta que «no hay ninguna evidencia de su utilidad o beneficio para la prevención o tratamiento de la covid-19 y, por el contrario, hay riesgos potenciales de su uso y no se recomienda su administración o la su combinación con otras terapias en relación con la infección por SARS-CoV-2».
