Poble Lliure, organización independentista integrada en la CUP, apuesta porque las izquierdas independentistas impulsen «candidaturas unitarias y republicanas» para las elecciones municipales de 2019. El portavoz de esta formación, Guillem Fuster, ha planteado que estas listas tienen que ser «un muro de contención ante el fascismo» y han de establecer las bases «para la construcción de la República Catalana».
Además, Poble Lliure quiere que las fuerzas independentistas promuevan la creación de un «Congreso Nacional del Pueblo Catalán», ya que consideran que hay una «situación de emergencia nacional». Aboga, de hecho, por una dirección estratégica compartida por el soberanismo.
Por su parte, el PDECat pretende confluir bajo la marca Junts per Catalunya sin renunciar a formar candidaturas unitarias en municipios donde «la disgregación de fuerzas» les impide incidir en la gobernabilidad, como por ejemplo los del área metropolitana de Barcelona.
La decisión ha sido adoptada en una convención intermunicipal celebrada en Castelldefels con la intención de asegurar «el mayor número posible de gobiernos soberanistas en los ayuntamientos», según el manifiesto de los posconvergentes.
La alcaldable del PDECat en Barcelona, Neus Munté, en particular, se ha mostrado abierta a la fórmula de la candidatura unitaria y a incorporar independientes a las listas.
