El primer ministro belga, Charles Michel, ha asegurado que sólo se podrá plantear una mediación europea o internacional sobre la situación en Cataluña si fracasa el diálogo en España. «Sólo si constatáramos un fracaso definitivo del diálogo se tendría que plantear la cuestión de una mediación internacional o europea».
Para el político liberal, que gobierna con el apoyo del partido nacionalista flamenco, la crisis en Cataluña «pone a prueba Europa». «Es una crisis institucional y política en un país que pone en juego cuestiones fundamentales, la expresión de un voto, opiniones, el uso de la fuerza», ha indicado.
Según la opinión del primer ministro belga, «el sentido común quiere que haya diálogo». «Hay una guerra de nervios que se tiene que parar en un momento dado para abrir el diálogo político», ha comentado. Y ha recordado además que la misma Comisión Europea ha solicitado diálogo para encontrar una solución a la situación.
No obstante, el Ejecutivo comunitario ha rechazado cualquier petición para actuar de mediador entre el Gobierno español y el regional de Cataluña, al considerar que esta situación trata de un «asunto interno» de un Estado miembro que se tiene que resolver según el orden constitucional español.
