El ex-director general de Caixa Catalunya, Josep Maria Loza, figura en la lista de 15 querellados por la Fiscalía Anticorrupción por el agujero de 721,4 millones provocado con las aberrantes aventuras inmobiliarias que financió esta entidad de ahorros, actualmente absorbida por el BBVA. Josep Maria Loza, que fue cesado del cargo en 2008, era el máximo ejecutivo de Caixa Catalunya cuando se firmaron la mayoría de las 32 operaciones que están bajo sospecha y que fueron denunciadas por el FROB a la Fiscalía Anticorrupción.
A instancias del ex-presidente de la caja, Narcís Serra, que también ha sido querellado por «administración desleal», Josep Maria Loza fue prejubilado y, en su lugar, fue designado Adolf Todó, afectado por dos querellas de la Fiscalía Anticorrupción: la del agujero de 721,4 millones y la de los sobresueldos que le aprobó el consejo de administración.Adolf Todó ha afirmado que Josep Maria Loza fue en «un 95%», el responsable del hundimiento de Caixa Catalunya.
Pero Josep Maria Loza marchó de la entidad con el riñón bien cubierto: su indemnización, pactada con Narcís Serra, ¡subió a 11 millones de euros! Por eso, el FROB también ha instado a la Fiscalía Anticorrupción que le presente una querella criminal.
Para lavar su «mala conciencia«, Josep Maria Loza se ha vinculado a la ONG Joan Salvador Gaviota, donde actualmente ejerce el cargo de tesorero (!). Esta ONG, fundada por Concepció Mata y con sede en el Raval de Barcelona, se ocupa de atender a familias y, en especial, a niños y jóvenes en riesgo de exclusión social. Tiene un presupuesto anual de 800.000 euros y las principales aportaciones vienen del Ayuntamiento de Barcelona, la Generalitat y la Fundación La Caixa.
