La Policía Nacional ha efectuado 27 detenciones en una nueva acometida, esta vez supervisada por el juez Eloy Velasco, contra grupos anarquistas de todo el Estado, tres meses y medio después de la operación Pandora, que se centró en Barcelona y fue ordenada por el juez Javier Gómez Bermúdez.
Operación Piñata
La mayoría de las detenciones de este lunes -15- se han practicado en un edificio ocupado del barrio madrileño de Vallecas, mientras que, en Barcelona, tres personas más han sido detenidas, una en Sant Andreu de Palomar, otra en Poble Sec y una tercera en Sants. También se han practicado arrestos en Granada y Palencia.
A 13 de los 27 detenidos se les considera miembros de los llamados Grupos Anarquistas Coordinados (GAC) y se les acusa de pertenencia a organización criminal con finalidad terrorista y de haber efectuado sabotajes y haber colocado artefactos explosivos e incendiarios. Los 14 detenidos restantes están acusados de resistencia a la autoridad.
Lavapiés y Vallecas
«Criminalizar y represaliar» al movimiento anarquista es el objetivo que los miembros del centro social autogestionado La Quimera, del barrio madrileño de Lavapiés, atribuyen a las autoridades en un comunicado. Explican que, hacia las 6.30 horas de esta mañana, agentes policiales les han destrozado la puerta y, sin darlos ninguna explicación sobre su actuación, han iniciado las confiscaciones. También el centro social autogestionado 13-14 de Vallecas ha sido registrado. La Policía se ha llevado ordenadores y documentación.
Cacheos en Barcelona
En Barcelona, además de efectuar tres detenciones, los agentes han registrado al menos una vivienda en el barrio de la Verneda y otro en el Poble Sec.
Para protestar contra esta operación se han convocado dos manifestaciones que tendrán lugar en la plaza del Mercado del Clot de Barcelona y la plaza del Vi de Girona, a partir de este mismo lunes a las 20 horas.
Operación Pandora
A siete de los once detenidos en la operación efectuada hace más de tres meses también se los clasificó como terroristas anarquistas del GAC y quedaron libres con cargos el pasado 30 de enero después de depositar una fianza de 3.000 euros. El juez Gómez Bermúdez decretó que los cuatro restantes se tenían que presentar una vez por semana en el juzgado más cercano en casa suya.
