«Serán inútiles las cadenas de un poder esclavizante», como reza el verso del tema ‘Venimos del norte venimos del Sur’ de Lluís Llach, interpretado este miércoles por el cantautor Joanjo Bosk durante el acto Rodeemos La Caixa, los organizadores han querido que la cadena humana que ha rodeado la entidad financiera sirviera para «enriquecer» y dotar de una «dimensión social» a la Vía catalana.
El llamamiento del Proceso Constituyente para participar del acto alternativo a la cadena humana organizada por la Asamblea Nacional ha desbordado la organización y se han tenido que montar dos hileras de personas que han rodeado las torres que La Caixa tiene a la Diagonal de Barcelona.
Los problemas organizativos -desbordados por los más de 4.000 assistentes y problemas con el sonido- no han deslucido una jornada reivindicativa que, como ha dicho una de las cabezas visibles del Proceso Constituyente, Arcadi Oliveres, tenía por objeto pedir que el proceso independentista se complemente con una revolución social.
Sin reproducirse el perfil independentista que ha movilizado la Vía catalana, la mayoría de personas de todas las edades que se han acercado a La Caixa llevaba la camiseta roja del Proceso Constituyente y cantaba proclamas contra los bancos y los recortes del Gobiernos de Mas y Rajoy. Las 5 o 6 banderas estelades que se han podido ver durante la jornada, ondeaban acompañadas de alguna bandera pirata, del arco iris o de color lila.
A las 17h han acabado los parlamentos protagonizados por colectivos como la Asamblea de Trabajadores de la Ciutat de Justicia o Escuelas Guarderías Indignadas, y han dejado paso a la cadena humana que durante unos 20 minutos ha rodeado las torres de La Caixa resiguiendo la vía pública.
