Este miércoles, el pleno del Parlamento ha rechazado las enmiendas a la totalidad que habían presentado C’s, PSC, CSQP y el PP a la propuesta de reforma del reglamento del Parlamento. Por lo tanto, la propuesta que había sido redactada por Junts pel Sí y la CUP, que permitirá agilizar la aprobación de las llamadas «leyes de desconexión», ha superado su primer trámite parlamentario. Ahora, la propuesta tendrá que ser debatida en comisión, antes de volver al Pleno para que sea aprobada definitivamente.
Cuando el presidente del grupo parlamentario de Junts pel Sí, Jordi Turull, ha presentado la modificación todos los grupos de la oposición han cargado contra él, acusando al Gobierno de actuar «como un Nicolás Maduro de turno«. Sin embargo, Turull ha considerado que «ningún grupo» se puede ver «perjudicado» a raíz de esta reforma. «No aprobamos nada excepcional que no esté vigente en otras cámaras», ha destacado el presidente del grupo parlamentario.
La propuesta posibilitará que una proposición de ley se tramite en lectura única si lo acuerda el Pleno a petición del grupo o grupos promotores. Un procedimiento que, hasta ahora, sólo se podía utilizar si la propuesta la firmaban todos los grupos. Según la hoja de ruta del Gobierno catalán, esta ley permitirá pasar de la legalidad española a la catalana y convocar el referéndum sin acuerdo con el gobierno español.