El gobierno de la Generalitat prevé declarar la semana que viene el estado de «preemergencia» por sequía en el sistema Ter-Llobregat, según han anunciado este martes la portavoz del ejecutivo catalán, Patrícia Plaja, y el director de la Agencia Catalana del Agua (ACA), Samuel Reyes. Esta decisión implicará más restricciones en el consumo de agua, pero Plaja lo ha justificado aduciendo la actual situación de sequía y la falta de lluvias.
«Hay que tomar medidas extraordinarias», ha aseverado la portavoz del gobierno catalán, que ha destacado que es «la peor sequía que ha vivido jamás Cataluña». Plaja también ha recordado que actualmente los embalses están al 18,89% y que hay que actuar antes de que se encuentren con las reservas por debajo del 16%, cifra que marca la entrada en la fase de emergencia, que está prevista a finales de diciembre.
A su turno, el director de la ACA ha advertido de que se entra en un escenario «muy complicado» después de un otoño muy seco y ha avisado de que la situación de sequía es «muy crítica». Por eso, ha indicado, se plantean un estadio «intermedio» entre la excepcionalidad y la emergencia que permita intensificar algunas medidas o restricciones durante el próximo mes o mes y medio. Sobre las medidas concretas que se podrían intensificar durante este periodo transitorio, ha dicho que se concretarán en los próximos días.
Reyes también ha matizado que este estadio intermedio de preemergencia solo se aplicaría en el sistema Ter-Llobregat porque es donde viven más personas y donde hay más actividad comercial e industrial, puesto que incluye el área metropolitana de Barcelona. «El esfuerzo que podemos hacer desde la región metropolitana en beneficio del resto de comarcas es muy importante», ha afirmado.
