El Servei Català del Trànsit (SCT) ha incorporado un dron para realizar controles del funcionamiento de la movilidad y también para detectar infracciones. Hasta ahora se han realizado seis vuelos en el marco de una prueba piloto que establece 18 operativos hasta diciembre. Este viernes, se ha hecho uno en la AP-7 a la altura de Castellví de Rosanes, cerca de la incorporación de la A-2 junto a Martorell.
«Con el dron podemos conocer qué está pasando pero también obtenemos datos que permiten tomar decisiones para mejorar la movilidad», ha explicado la subdirectora general de Gestió del Trànsit del SCT, Lourdes Puigbarraca, que ha avanzado que estudian incorporar en el aparato las funciones de radar. Sin embargo, no ha concretado cuándo podrían entrar en funcionamiento.
En cuanto a la detección de infracciones, son operativos coordinados con los Mossos d’Esquadra, que ya han puesto las primeras multas a conductores pillados haciendo alguna irregularidad. Si bien el cuerpo policial no ha precisado cuántos expedientes sancionadores se han iniciado por infracciones captadas con el dron, Puigbarraca ha destacado que el aparato capta «con mucha perfección» el detalle de aquellos conductores que están utilizando el móvil o comiendo, así como aquellos que no llevan abrochado el cinturón de seguridad. Algunos de estos casos fueron captados recientemente en un control en la C-31 en las Costes del Garraf.
