La Agencia Catalana de Consumo (ACC) ha detectado varias irregularidades en el servicio de información y atención al cliente en los viajeros afectados desde lunes por la avería en la R2 sur. Según explica el organismo en un comunicado, en algunas estaciones se han observado deficiencias en la información con relación a las alteraciones del servicio, los horarios y los transportes alternativos; y se han detectado puntos de atención al cliente cerrados o la venta de billetes por medio de máquinas automáticas para trayectos suspendidos, entre otros.
Los inspectores han recorrido varias estaciones como Barcelona-Sants, Paseo de Gracia, Camp de Tarragona, Reus y L’Aldea-Amposta-Tortosa. Por ahora, Consumo continuará con las inspecciones y valorará si incoar un expediente sancionador. También señala que lleva a cabo estos controles para velar por los derechos de los usuarios de Cercanías y para asegurar que Renfe da cumplimiento a sus obligaciones para minimizar las consecuencias de las incidencias.
Por su parte, Renfe asegura que mantiene una «comunicación constante» con los responsables del Departamento de Territorio, titular del servicio, y que, añade, dispone de toda la información de cómo se gestionó el servicio desde el inicio de la incidencia. También comenta que pidió reforzar el servicio Buzo Express entre Vilanova i la Geltrú y Barcelona. Por otro lado, la operadora afirma que «se ha atendido y dado respuesta» a las demandas planteadas por los inspectores y que la colaboración «siempre es máxima» con la Generalitat.
