La CUP cree que «no es el momento de elecciones anticipadas» y se centra en reforzar la movilización en la calle. En una entrevista con la ACN, el diputado de la CUP Xavier Pellicer da la legislatura por «prácticamente agotada» y avanza que ya trabajan para construir «una alternativa» al Gobierno de ERC, al que ve «secuestrado por los grandes poderes económicos» y que no ha «respondido a las expectativas».
«Nuestra prioridad es estar junto a las personas que se movilizan para defender los servicios públicos, el territorio y que están implicadas en la lucha antirrepresiva», remarca. Pellicer recrimina al ejecutivo de Pere Aragonès que «apele a la mayoría independentista cuando le interesa» y pacte con el PSC macroproyectos como la ampliación del aeropuerto del Prat.
«Tampoco nos vale que esté generando las condiciones para desmovilizar a la calle con la mesa de diálogo y la normalización de las relaciones con el Estado cuando sigue la represión», critica el diputado anticapitalista, remarcando que esta política del Gobierno catalán impide «avanzar en la autodeterminación» de Cataluña.
La CUP reitera su apuesta por un nuevo referéndum de independencia sin ningún pacto con el Gobierno central. Los cupaires consideran que es la vía «que a medio plazo» puede crear «una correlación de fuerzas y movilización en la calle para hacer frente al Estado». De este modo, reniegan de la propuesta de alzar la Declaración Unilateral de Independencia (DUI) porque consideran que no hay «las fuerzas» necesarias para salirla adelante.
Pellicer asegura que están dispuestos a abordar otras propuestas, pero no ve intención en los otros partidos independentistas para avanzar hacia la secesión. A ERC le reprocha que se intente «perpetuar en el poder» renunciando incluso a «planteamientos históricos como la oposición en el Cuarto Cinturón», y a Junts que no «aterrice propuestas concretas» para reactivar el camino hacia la independencia.
