La cancelación del programa Zona Franca de TV3 no ha comportado la defensa que esperaban sus miembros por parte de JxCat y el Consell de la República. Ni el presidente del Consell de la República, Carles Puigdemont, ni los dos líderes de JxCat, Laura Borràs y Jordi Turull, se han manifestado públicamente contra la decisión de cerrar un programa que ha defendido sus intereses políticos e ideológicos en los tres meses y medio que ha estado en antena. Ninguno de ellos ha escrito un mensaje en Twitter elogiando su labor. Del círculo cercano a Puigdemont, el único que ha tenido un pequeño gesto hacia Joel Díaz y su equipo ha sido su jefe de Oficina, Josep Lluís Alay, quien retuiteó el mensaje en el que el presentador de Zona Franca anunciaba las razones de su dimisión. Esa dimisión es la que ha provocado el cierre del programa.
Tampoco han hecho comentario alguno ni en las redes sociales ni en ninguna parte los dos miembros que JxCat colocó en la dirección de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA): la ex-consejera de Cultura Àngels Ponsa y el ex- diputado Josep Riera.
En cambio, la CUP ha pedido la dimisión del director de TV3, Sigfrid Gras, y ha salido en tromba y con un mensaje unificado para justificar el gag del colaborador de Zona Franca Manel Vidal en el que identificaba a los votantes del PSC con una esvástica nazi y que ha comportado su despido por parte de la CCMA. Joel Díaz ha justificado la renuncia a seguir presentando el programa por su solidaridad con Vidal. Es “una decisión que considero injusta e inaceptable tanto en el fondo como en la forma en que se ha tomado y comunicado”, escribió en Twitter. Este mensaje ha contado con un espectacular número de visitas. Muchos dirigentes de la CUP han marcado que les gustaba o lo han retuiteado con comentarios de apoyo. El diputado cupero en el Congreso Albert Botran lo ha valorado así: “una decisión que agranda a Joel y que empequeñece a la dirección de la CCMA y de TV3”. Xavier Pellicer, diputado de la CUP en el Parlament, ya había dicho en la comisión de control de la CCMA del pasado viernes que el gag de Manel Vidal le parecía bien puesto que iba contra uno de los partidos que forman el gobierno español. Otra diputada de la CUP en el Parlament, Eulàlia Reguant, difundió el vídeo de este gag que se había eliminado de la web del programa. Entre los ‘me gusta’ y retuits del mensaje de Díaz se encuentran numerosos cargos del partido de varios niveles administrativos y de gobierno de Catalunya.
Sólo personajes de segunda fila de JxCat o del Consell de la República, como Rai López, han salido en defensa de los responsables del programa defenestrado. Se explica así la queja rabiosa de Jair Domínguez, humorista de Està passant (TV3) y El búnquer (Catalunya Ràdio), que participó en uno de los programas de Zona Franca para cubrir a última hora la baja de un invitado que se puso enfermo. “La sensación de desprotección siempre está ahí, latente, pero cuando pasan cosas como lo de @massanagranaire (Manel Vidal) y ves que ni los que supuestamente comulgan con la causa tienen narices (porque poder sí tienen) de defenderte, da una rabia tremenda”, escribió el día antes de que Díaz anunciara su dimisión y la CCMA cancelara el programa. Su rabia habrá aumentado, se supone.
