La sanción de 12.001 euros que el Consejo del Audiovisual de Cataluña (CAC9 impuso a la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA) por el uso indebido de la publicidad en el programa Bricoheroes no ha impedido que se sigan cometiendo nuevas infracciones en los capítulos que cada domingo se suben al canal de Youtube de TV3. Desde que se conoció la imposición de la multa, los vídeos del programa incluyen, al principio, un rótulo anunciando la colaboración de algunas de las empresas de las que se hace publicidad, pero este anuncio ni incluye todas las que aparecen ni justifica que se haga «incitación directa a la compra».
En el episodio emitido el pasado domingo, Bricoheroes incluyó tres marcas de las que hicieron exhibición de los dos actores que intervienen en él, Jair Domínguez y Lluís Jutglar (Peyu). Estas marcas fueron FESMéS y Powerplus, empresas especializadas en herramientas de bricolaje, y Cebasa, que comercializa cemento. En el expediente que elaboró el CAC y que comportó la sanción a la CCMA se recogía que se hacía publicidad de FESMéS y Powerplus «con falta de advertencia» y «prominencia indebida». La norma que debe cumplir la CCMA para que los programas que emite no incurran en “falta de advertencia” es que su presencia se anuncie al empezar el programa y después de las pausas de publicidad. En la última edición de Bricoheroes sólo se anunció la colaboración de FESMéS al inicio del programa. No se advirtió de la presencia de Cebasa y Powerplus y tampoco se hizo mención alguna de la colaboración de estas empresas tras la pausa publicitaria.
Todos los programas de la nueva temporada de Bricoheroes los grabaron Peyu y Domínguez el pasado verano antes de que se conociera el expediente y la sanción del CAC. La CCMA sólo ha podido añadir el rótulo inicial aludiendo a las empresas de las que se hace publicidad pero eliminar las partes donde aparecen las marcas es prácticamente imposible porque haría que algunos episodios perdieran sentido o quedaran muy cortos. Por pereza o por falta de voluntad, quien en nombre de TV3 revisa los episodios y añade los rótulos iniciales no ha incluido a todas las empresas implicadas.
Por otro lado, Peyu y Domínguez continuaron saltándose las normas del Libro de Estilo de la CCMA en cuanto al respeto a los colectivos minoritarios y evitar las expresiones y comportamientos machistas. Volvieron a bromear con la prostitución de menores aunque el director de TV3, Vicent Sanchis, ordenó que se cortara la parte de un capítulo en el que los dos actores tenían fantasías eróticas con una felación hecha por una hija menor de la reina Letizia. Este domingo, Peyu simuló que entendía mal el anuncio de prostitución que leyó en un periódico, pretendiendo que entendía que trabajaban chicas de 12 a 20 años para descubrir finalmente que el horario del local anunciado era de 12 a 20 horas.
Peyu utilizó la palabra “moro” para referirse a un hombre de nombre árabe que había hecho un vídeo que criticaron y cuando Jair Domínguez le habló del cantante Pitingo, le preguntó si era el gitano, frente a las risas del su compañero. La Federación de Asociaciones Gitanas de Cataluña (FAGIC) envió hace unos días una carta de queja a la presidenta de la CCMA, Núria Llorach, porque en un programa anterior de Bricoheroes se calificó de ladrones a los miembros del pueblo gitano. Ciudadanos ha pedido que el presidente de la FAGIC comparezca en la Comisión de Control de la CCMA en el Parlamento catalán y ha llevado la queja de la FAGIC al Parlamento europeo.
