El abogado de Carles Puigdemont, Gonzalo Boye, ha afirmado que si la justicia belga acabara considerando inocente al expresidente catalán huido de la justicia española, éste y el resto de dirigentes independentistas huidos podrían volver a España y no se les podría detener. En una entrevista a Catalunya Ràdio, Boye argumenta esta afirmación en el hecho de que el Tribunal Europeo denegó una extradición a los EE. UU. de un hombre que ya había sido juzgado, por el mismo delito que lo reclamaba la justicia norteamericana, en Alemania.
Se da la circunstancia, pero, que el caso de Puigdemont y los otros independentistas huidos ninguno de ellos ha sido juzgado en ningún país de la Unión Europea. De hecho, lo que han hecho la justicia belga y alemana es denegar sus extradiciones al considerar que algunas de las razones por las cuales los reclamaba la justicia española, como el delito de rebelión o el de alteración del orden público, no se correspondían con el derecho de los países en los cuales se encuentran ahora.
A pesar de que lo que defiende Boye no es aplicable hoy a los independentistas catalanes que se encuentran huidos porque ninguno de ellos ha sido juzgado, el expresidente Puigdemont se ha apresurado a publicar en las redes sociales: «Gracias Gonzalo Boye y gracias al equipo que desde Alemania planificó esta estrategia. Discreta y calculada. Así se cambian las cosas (aunque la opinocracia catalana ni se enterará)».
