El programa electoral de Junts, cuya publicación se ha hecho esperar hasta bien entrada la campaña del 14-F, no incluye ninguna referencia a los impuestos de sucesiones y de patrimonio. No es un detalle menor, considerando que el número 3 por Barcelona de Junts, Joan Canadell, se mostró partidario este mes de enero de eliminarlos «tan pronto como se pueda, como la mayoría de países de Europa». Por otra parte, otras figuras puigdemontistas se han ubicado en la izquierda y han promocionado la candidatura diciendo que es transversal, y la existencia de esos impuestos -en parte regulados por el Estado central y en parte por las Comunidades Autónomas – constituye uno de los puntos calientes que a menudo separa a la izquierda de la derecha política.
El programa, un documento de 342 páginas que ya se puede consultar en la web del partido, refleja planes de futuro, como el modelo aeroportuario, y reitera los saltos adelante que Cataluña, según asegura, podría dar como Estado independiente, pero no hace ninguna mención ni del impuesto de patrimonio, ni del de sucesiones, ni de las herencias. En cambio, establece compromisos en materia de impuestos entre los que cita, en primer lugar, el de conseguir «que los recursos provenientes del impuesto de sociedades que se destinan ahora sólo a entidades de ámbito estatal, tengan un reparto justo y se dirijan también a las entidades territoriales».
Asimismo, Junts prevé potenciar la Agencia Tributaria Catalana «para que tenga capacidad para gestionar el 100% de los impuestos que se pagan en Cataluña», reducir «la presión fiscal a las empresas y autónomos bajando impuestos y las tasas relativas a la legalización de sus negocios «, y primar «la reinversión de los beneficios empresariales impulsando a nivel estatal un incremento sustancial en la bonificación del impuesto de sociedades en relación con la parte de los beneficios reinvertidos en la misma empresa y no distribuidos como dividendos «.
La candidatura que encabezan Carles Puigdemont y Laura Borràs también se compromete a impulsar «tipos reducidos de IVA y otros impuestos indirectos que gravan los productos de consumo habitual para la subsistencia de las familias, y tipos más elevados para los productos de lujo «, así como a promover «una firme armonización de la base imponible del impuesto de sociedades a nivel europeo para luchar contra la elusión fiscal «, y a exigir «el traspaso total del impuesto sobre contenidos digitales».
«Es evidente que mientras no seamos Estado y mantengamos un déficit fiscal cercano al 8% del PIB será difícil contar con muchos más recursos», manifiesta también Junts, antes de añadir que «si queremos poner la transición a la sociedad del conocimiento como uno de los ejes principales para mejorar el valor añadido, la calidad del empleo y, en definitiva, la recaudación de impuestos y el consiguiente Estado del Bienestar, hay que destinar partidas superiores a las actuales».
