Los seguidores del Barça estallaron antes del inicio del Barça-Eibar en el Camp Nou. El presidente, Josep Maria Bartomeu, se llevó su primera pañuelada desde que dirige el club y tuvo que sentir gritos de "dimisión" en los minutos previos al inicio del choque.
Los pañuelos empezaron a exhibirse desde el fondo norte y despacio se extendieron por el resto del estadio. Primero hubo pañuelada y al rato resonó con fuerza "Bartomeu dimisión", mientras los jugadores estaban sobre el terreno de juego esperando que el colegiado señalara el inicio del partido.
Los gritos se interrumpieron con el silbato inicial y la Grada de Animación cogió la batuta para empezar a animar al equipo en el partido ante el Eibar. Sin embargo, volvieron en el compás de espera que el VAR ratificara un gol en fuera de juego de Sergi Enrich. La Grada de Animación volvió a la carga entonces para vitorear a los jugadores y empujar a lograr la victoria.
El público mostró de este modo su disconformidad en una semana convulsa después de que se destapara el 'Barçagate' a la Cadena SER.
