Meritxell Budó, consejera de la Presidencia desde marzo de 2019, consideraba que Esquerra Republicana (ERC) era "el enemigo" en una conversación mantenida con compañeros de partido mediante una aplicación de mensajería, incluida en el sumario sobre la presunta corrupción en la Diputación de Barcelona y correspondiente al año 2017.
Budó, entonces alcaldesa de la Garriga, escribió en una conversación con Mercè Conesa, Joaquim Forn, Marc Castells, Jaume Ciurana y Joan Carles Garcia Cañizares: "Lo que está claro es que hoy por hoy gobernamos con el enemigo. Por tanto, no podemos dejar nada sin controlar, sea o no área nuestra. Es importante. La ventaja: tenemos la presidencia de la DIBA (la Diputación) para capitalizar sus temas. ¡¡¡Ellos eso no lo tienen!!!".
Dos años después, Budó sustituyó a Elsa Artadi al frente de la consejería de la Presidencia y como portavoz de un gobierno en el que las siglas sucesoras de Convergència, como en aquella la etapa de la Diputación, comparten gobierno con ERC.
Budó escribió ese comentario después de que Ciurana apuntara que el "problema principal" del PDECat en la Diputació era haber cedido el área de Territorio a ERC, "la que da más juego", según él.
Mercè Conesa, por su parte, respondió: "Yo quería pactar con el PSC y no con ERC. Como mínimo nos repartíamos el territorio y no entrábamos en competencia".
Poco después, Conesa incorporó al gobierno local de Sant Cugat del Vallès al único regidor del PSC y ERC reaccionó rompiendo el acuerdo presupuestario que tenía en aquel ayuntamiento con los posconvergents.
