Los Mossos tienen ya diseñado un plan especial de actuación para tratar de hacer frente a los planes de los Comités de Defensa de la República (CDR) en la jornada de reflexión y el 10-N. Según publica El Mundo, los servicios de información y de inteligencia del cuerpo policial catalán han detectado que los independentistas quieren convertir el día 9 de noviembre en otra jornada de protestas. Quieren llevar a cabo actuaciones este día para tratar de alterar la jornada electoral, el día siguiente.
La idea de los Mossos sería, según indica el medio, blindar los colegios catalanes donde se celebran las votaciones y dónde han detectado que los CDR buscarán protagonizar sus acciones.
Así, por un lado los Mossos preparan un dispositivo en los accesos a los recintos, que se iniciaría el viernes 8, una vez que los centros estén parados. También se prepara un dispositivo para recintos escolares que tienen más complejidad a la hora de llevar a cabo un despliegue preventivo exterior. En estos casos el plan es que se cierren en su interior un número suficiente de efectivos policiales que pueda impedir el asalto de los CDR si intentan ocuparlos.
Por otro lado, el gobierno español, en previsión de las elecciones del 10 de noviembre y de la visita del Rey este lunes, ha enviado a otros 300 agentes antidisturbios de la Policía Nacional. Además, el Ministerio del Interior mantiene todavía acuartelados a casi un millar de agentes de la Guardia Civil que hasta la fecha apenas han tenido que intervenir, únicamente en la protección de infraestructuras esenciales del Estado.
