El independentismo catalán tiene puesta una vela con la esperanza de un acuerdo entre PSOE y Podemos, el cual favorecería un gobierno en España menos beligerante con Cataluña que uno de las derechas. Además, el independentismo no ve claro ir a unas nuevas elecciones el mes de noviembre, con la sentencia del juicio al proceso independentista acabada de hacerse pública.
A pesar de que tanto ERC como JxCat votaron no a Pedro Sánchez en la primera votación, todo indica que si hubiera un pacto entre las dos fuerzas de izquierdas españolas, habría un cambio en el sentido del voto. Gabriel Rufián, portavoz de Esquerra en el Congreso, ya lo insinuó en su discurso de martes. Casi seguro que si Sánchez y Pablo Iglesias sellan un acuerdo de investidura, los votos de ERC serán la abstención, lo cual permitiría la elección del secretario general del PSOE.
La incógnita sería Junts per Catalunya, que también votó en contra con un duro discurso. Fuentes independentistas dicen que también podrían cambiar el sentido del voto absteniéndose, que es la opción del sector posibilista de JxCat. A pesar de esto, Carles Puigdemont y sus seguidores preferirían que en España hubiera un gobierno de las derechas españolas surgido de las nuevas elecciones del mes de noviembre, si antes no hay un acuerdo en el Congreso para investir a Sánchez. Así, habrá que ver cuál es la opción de voto final de la antigua Convergencia, que fue una formación que hacía valer sus votos en el Congreso de los Diputados.
