El gobierno de Pedro Sánchez construirá la negociación con el presidente Quim Torra en base a 45 de los 46 puntos que el expresidente Carles Puigdemont hizo llegar a Mariano Rajoy en abril del 2016.
El punto número 46, el referéndum, no se pondrá sobre la mesa. Lo ha dejado bien claro la nueva ministra de Política Territorial y Función Pública, Meritxell Batet. La política catalana ha trazado esta línea roja.
También se refiere hoy al asunto el ministro de Fomento y secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, en una entrevista a la ABC. Sobre estos 46 puntos, dice: «Nuestra posición es que se puede hablar. Pero en cuanto al referéndum, no hay nada a negociar».
La vicepresidenta Carmen Calvo ha hablado del tema a El País. El referéndum «no entra en ninguna agenda del gobierno de España. No puede entrar. Nosotros también somos el gobierno de los catalanes, tanto de los independentistas como de los que esperan que su gobierno esté a la altura de la tranquilidad que necesitan».
Otro hombre clave en las negociaciones entre el Estado y Cataluña, Miquel Iceta, se refiere al referéndum en una conversación con La Vanguardia. El primer secretario del PSC asegura que no hay margen para un referéndum.
La propuesta de Puigdemont a Rajoy en abril de 2016 doblaba la de su antecesor, Artur Mas, en julio de 2014. Ahora hace cerca de dos años, cuando Puigdemont la presentó, el PP sólo había cumplido una propuesta y media.
