Pintadas contra Juan Antonio Ramírez Sunyer, el magistrado que ordenó detenciones de altos cargos del gobierno catalán en el marco de la investigación sobre el 1-O, aparecieron en la localidad de El Port de la Selva, donde tenía alquilado un apartamento.
Según explica El País, aparecieron hace aproximadamente un mes en un panel informativo y en la zanja de madera que rodea unos contenedores y, después, en el edificio donde Ramírez Sunyer tenía su segunda residencia, que ha abandonado porque el propietario le dijo que no renovaría el contrato, añade esta información.
Las pintadas decían «M S j. 13 fuera de El Port» y «»Fuera j. 13». En el caso del bloque de pisos, todavía no había sido borrada el último fin de semana. Las otras, también cercanas al edificio, fueron limpiadas por el Ayuntamiento de la localidad, un feudo convergente, como explicó EL TRIANGLE.
Las actuaciones ordenadas por Ramírez Sunyer incluyeron los registros y las detenciones en las dependencias del Departamento de Economía que motivaron la organización una protesta independentista ante las puertas. En ese contexto, la comitiva judicial no pudo abandonar las dependencias de la consejería durante seis horas. A raíz de aquellos hechos se ha acusado de sedición y se ha encarcelado preventivamente a los dirigentes del ANC y Òmnium Cultural, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart.
En Barcelona, por otra parte, la policía ha detenido a un hombre de 20 años acusado de celebrar la muerte del fiscal general del Estado, José Manuel Maza, y de amenazar de muerte al delegado del Gobierno en Cataluña, Enric Millo, desde Twitter.
