Finalmente, el independentismo concurrirá por separado a las elecciones del próximo día 21 de diciembre. Los últimos intentos del presidente cesado, Carles Puigdemont, que reclamaba desde Bruselas la necesidad de la lista unitaria no han fructificado, los partidos no se han puesto de acuerdo.
Lo explicaba antes de la medianoche el portavoz de ERC, Sergi Sabrià, que daba por imposible una candidatura soberanista «realmente unitaria» para las elecciones en Cataluña del 21-D después de que la CUP haya anunciado que no participará en ninguna coalición y que su asamblea elegirá entre cuatro alternativas.
«Ante la imposibilidad de formar una lista realmente unitaria, habrá que crear un frente común de candidaturas diferenciadas», ha dicho en un comunicado, a pesar de que ha recordado que ERC pretendía una candidatura de unidad que fuera desde el PDeCat y Demócratas hasta la CUP.
En todo caso, el portavoz republicano ha asegurado que su partido «trabajará para ampliar la candidatura y abrirla tanto como se pueda».
El PSC incorpora gente de Unió
Por otro lado, quien sí que ha llegado a un acuerdo es el PSC con Units per Avançar, por el cual la lista de los socialistas incorporará algunos nombres de la formación surgida a raíz de la extinción de Unión Democrática, con el objetivo de atraer votantes del catalanismo moderado.
No se trataría en ningún caso de una coalición, sino que los socialistas están dispuestos a incorporar algunos nombres de Units per Avançar a su candidatura.
El acuerdo implicaría integrar dos nombres de los democratacristianos en lugares de salida de la candidatura que encabezará el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, además de otros nombres por debajo.
