El séptimo grupo editorial del mundo, el Grupo Planeta, ha decidido trasladar su sede social de Barcelona a Madrid. Planeta ha tomado la decisión después de que el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, hubiera hecho una ambigua declaración de independencia en el Parlamento catalán para suspenderla inmediatamente.
El lunes, el Consejo de Administración acordó el traslado de la sede social del grupo si había una proclamación de independencia sin que hubiera que volver a reunir el consejo para decidirlo. El Grupo Planeta facturó 2.363.000 durante el ejercicio de 2015, lo qué representa un 8% más que en el ejercicio anterior, cerrando aquel año con un beneficio de 15,6 millones.
Planeta ha estado desde su fundación ubicado en Barcelona, y ya en 2012 el entonces presidente, José Manuel Lara Bosch, recordó que ya su padre, José Lara García, amenazó con llevarse la empresa fuera de Cataluña si se proclamaba la independencia. Ahora, el actual presidente del Grupo Planeta, José Creuheras ha afirmado que la posición empresarial del grupo es inequívoca.
Con el Grupo Planeta crece el número de empresas que marchan de Cataluña ante una eventual independencia. Este martes Catalana Occidente también ha decidido trasladar su sede social a Madrid. Otras empresas que han abandonado Cataluña son CaixaBank, Banco de Sabadell, Banco Mediolanum, Arquia Banca, GVC Gaesco, Gas Natural Fenosa, Agbar, Abertis, Cellnex, Colonial, Oryzon, Eurona, MRW, las aseguradoras SegurCaixa Adeslas y MGS Assegurances, la gestora EDM, VidaCaixa, Trea Asset Management, la farmacéutica Indukern, el grupo de viajes Edreams Odigeo, o la empresa de transplantes capilares Sanatur. Otras empresas como Freixenet, Codorniu o Idilia Foods, que engloba marcas como Cola Cao, no descartan marcharse.
