El Gobierno de la Generalitat no ha querido revelar los nombres de las personas que velarán por las garantías democráticas del desarrollo del referéndum independentista del 1-O y que tendrán que validar los resultados.
El consejero de la Presidencia, Jordi Turull, ha afirmado que las personas que tienen que supervisar la calidad democratica de la consulta serán ciudadanos con credibilidad académica y personal, pero que no hacen públicos los nombres «para evitar que sean víctimas de la represión del Estado«, pero añadiendo que «nadie dudará de su credibilidad».
Estas personas tendrán que sustituir a los miembros de la Sindicatura Electoral que abandonaron el cargo después de que la justicia les impones multas diarias de 12.000 euros por dar cobertura al referéndum declarado ilegal por el Tribunal Constitucional (TC). El consejero Turull no ha explicado cual ha sido el mecanismo para elegir estos sustitutos, teniendo en cuenta que los miembros de la sindicatura habían sido elegidos por el pleno del Parlamento de Cataluña.
El vicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras, ha remachado que «la legitimidad (de los resultados) se refuerza en cada una de las dificultades que nos ponen«. En este contexto, los miembros del gobierno catalán que han comparecido en la rueda de prensa para explicar el dispositivo de la Generalitat para el 1-O (el vicepresidente, Oriol Junqueras, el de Presidencia, Jordi Turull, y el de Asuntos Exterior, Raül Romeva) han insistido en que «a cada problema, una solución».
Ante la posibilidad que el domingo no pueda haber mesas y urnas en todas las poblaciones de Cataluña, por la actuación de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado que tienen el encargo de impedirlo, el vicepresidente Junqueras ha asegurado que «los ciudadanos de Cataluña podrán votar este domingo«.
Se ha explicado que en algunos casos de localidades donde no se han podido habilitar locales públicos, algunos ciudadanos han ofrecido sus locales privados para hacer las votaciones
Ante las preguntas sobre si, tal como dice la ley de Transitoriedad aprobada por el Parlamento catalán e ilegalizada por el TC, el resultado es favorable a la independencia de Cataluña habrá una proclamación de la república catalana, el vicepresidente Junqueras ha respondido que el Gobierno catalán actuará con responsabilidad y respetuosamente «con el mandato de los ciudadanos».
Algunos periodistas han mostrado su rechazo al hecho de que hayan tenido que pagar 10 euros para poder asistir a la rueda de prensa del Gobierno de la Generalitat al local que ha puesto a disposición del ejecutivo catalán el factotum de Mediapro, Jaume Roures.
En cuanto a cifras concretas, el consejero Turull ha explicado que el domingo 1-O, las urnas estarán abiertas de 8 de la mañana a 8 de la tarde. Turull ha cifrado en 5.434.358 los ciudadanos llamados a participar en la consulta, i que habrá 2.315 colegios electorales, de los cuales 207 estarán en la capital catalana.
El consejero de la Presidencia ha cifrado en 7.235 las personas que estarán implicadas en el desarrollo directo de la jornada del domingo, de las 50.000 que se ofrecieron a colaborar.
Desde el Gobierno catalán se ha explicado que el Síndic de Greugres (Defensor del Pueblo de Cataluña) y un grupo de observadores internacionales se encargarán a lo largo de todo el día de velar para que durante las votaciones se respeten los derechos fundamentales de las personas.
