El grupo terrorista que el jueves y la madrugada de viernes causó 14 muertos en los ataques de Barcelona y Cambrils preparaba, desde hacía meses, un gran atentado con artefactos explosivos en Barcelona. Sus planes, pero, se vieron frustrados por la explosión fortuita de unas bombonas de butano en una vivienda de Alcanar.
«La explosión de Alcanar hizo que ya no contaran con el material necesario para preparar atentados de más alcance en Barcelona», ha explicado a primera hora de la tarde el jefe de los Mossos d’Esquadra, Josep Lluís Trapero. «Probablemente estaban buscando otro tipo de atentado», ha añadido Trapero.
El resbalón con las bombonas de butano les llevó a improvisar y a actuar «de manera más rudimentaria». Los terroristas decidieron llevar a cabo entonces atropellos masivos, primero a la Rambla de Barcelona y, más tarde, en el paseo marítimo de Cambrils. En el primer caso, una furgoneta atropelló a decenas de personas (con el resultado de 13 muertos) y, en el segundo, resultaron heridas siete personas. Una de ellas es una mujer que fue apuñalada y ha muerto este viernes.
Cuatro personas han sido detenidas relacionadas con los atentados. Los detenidos son tres marroquíes y un español, este último nacido en Melilla. «Ninguno de ellos tiene antecedentes por delitos de terrorismo», ha subrayado Trapero. Tienen 22, 28, 34 y 27 años.
Además de los cuatro detenidos, hay otros cinco terroristas muertos. Todos ellos fueron abatidos en el segundo ataque perpetrado por los terroristas en Cambrils. No se descarta que el conductor de la Rambla fuera uno de los abatidos.
