Cuatro días antes de la consulta ciudadana para decidir que se hace con el monumento franquista a la Batalla del Ebro, el alcalde de Tortosa, el convergente Ferran Bel, ha anunciado que piensa votar a favor de mantenerlo.
De los ocho condejales del grupo municipal de CiU, seis –incluido el alcalde– se decantan por mantener y reinterpretar el monumento, mientras que los otros dos apuestan por su retirada y museización. Las formaciones de izquierda son partidarias de esta última opción.
Los ciudadanos de Tortosa decidirán este sábado, en una consulta, si retiran el monumento o lo dejan tal como está y dónde está, dentro del ríe Ebro.
El marzo pasado, el Parlamento de Cataluña aprobó una moción por la cual instaban a «retirar inmediatamente» el monumento, inaugurado por el general Franco el 1966 con motivo de los 25 años de la batalla del Ebro.
El alcalde Bel, que hasta ahora también era diputado en el Congreso, se ha comprometido a hacer cumplir el que decidan los ciudadanos de Tortosa en la consulta de sábado. En cambio, no ha hecho ningún caso a lo que aprobó el Parlamento de Cataluña.
