Infraestructures.cat, el principal organismo licitador de obra pública en Catalunya, sufre un problema añadido al del 3%, caso por el que está imputado su ex director Josep Antoni Rosell.
Según revela El Mundo, a raíz de la detención de Rosell se ha modificado el sistema de evaluación de los candidatos a obtener contratos públicos y los empleados de Infraestructures.cat denuncian que la opacidad se ha incrementado.
Los peritos y gerentes, explica la misma información, se ven obligados a asumir responsabilidades en concursos sobre los que no deciden. De este modo, los altos directivos han quedado protegidos en casos de irregularidades y se establece una corresponsabilidad para los cargos menores, expone El Mundo.
Técnicos y gerentes piden transparencia y temen responsabilizarse de adjudicaciones cuyo destino final ignoran. Este hecho se dejó notar en una votación efectuada el pasado 28 de enero, cuando los trabajadores de Infraestructures.cat, siempre según informa ese diario, exigieron al consejo de administración que parara el nuevo protocolo y que se delimitaran de manera clara las responsabilidades en la toma de decisiones.
