El exministro del Interior español Ángel Acebes hizo un papelón ante el juez Pablo Ruz durante su declaración en la Audiencia Nacional como imputado por un supuesto delito de apropiación indebida en el marco del caso de los papeles de Luis Bárcenas.
El Plural ha detallado de qué manera Ruz le dejó en evidencia. Acebes, que sólo quiso responder al juez, al fiscal y a su abogado, negó reiteradamente, de entrada, haber conocido a Gonzalo Urquijo, el arquitecto encargado de las obras de la sede del PP, presuntamente pagadas con dinero negro.
Ruz le preguntó sobre la adjudicación de las obras a la empresa de Urquijo y Acebes aseguró que no conocía a nadie de aquella empresa: «Cómo se adjudicó, a quién se adjudicó, de esa empresa no conozco a nadie, jamás me he reunido con ellos ni he participado en ninguna reunión que tenga que ver ni con la contratación, ni con los ingresos, ni con los pagos de esa obra. Porque no era mi responsabilidad».
Ante la insistencia de Ruz, Acebes dijo que quizás Urquijo le había saludado en algún acto que no precisó pero que «no le he conocido nunca ni he hablado con él nunca ni he tenido una reunión ni en el ámbito profesional ni en el ámbito personal».
Ruz se refiere entonces a fotos donde aparecen Acebes y Urquijo y le muestra una, pidiéndole que ubique el lugar donde se había tomado. La respuesta de Acebes, según las fuentes de El Plural, marcada por los balbuceos y las pausas, indica que se trataba de una sala de «la planta segunda» y que se trata de la «copa de Navidad», acontecimiento al que el gerente invitaba a personal del partido y «si estaba trabajando este señor, pues?». Y sigue: «Eso… eso es que estábamos… yo creo que, por donde se celebraba, es la copa de Navidad. Es decir, es probable que nos representasen, se lo he dicho antes en la respuesta, es probable que me lo hayan presentado a este señor, pero vamos, que ahora que he visto la foto no le reconozco. Si me lo encuentro por la calle no le reconocería, tenga en cuenta que a lo mejor a ese acto van 300 o 400 personas».
Sus contundentes afirmaciones anteriores -relación con Urquijo, negación de la caja ‘b’, desvinculación de la orden de compra de acciones de Libertad Digital– habían quedado en evidencia a partir de aquel momento.
