La muerte de Alfons Bayard tras ser esposado por los cuerpos de seguridad en una cafetería del distrito de Sarriá-Sant Gervasi de Barcelona ha vuelto a despertar sospechas entre la población. Todavía es reciente el caso del empresario Juan Andrés Benítez muerto en el Raval después de los golpes recibidos de los Mossos d’Esquadra.
La actuación policial que, según los vecinos, fué correcta en todo momento vuelve a estar en el punto de mira. El conocido actor catalán moría a consecuencia de una parada cardiorespiratoria mientras era reducido por tres mossos de los siete que se presentaron en la terraza de una cafetería de la plaza Molina.
Montserrat, propietaria de la tienda de perfumes contigua a la terraza, nos comenta que «antes de que vinieran los mossos, una patrulla de la Guardia Urbana no pudo reducirlo y por esta razón pidieron refuerzos» y aclara que «vinieron siete mossos en total y no hacía falta tanta gente por un solo hombre». Sonia, dependienta de un comercio colindante, nos indica que «el hombre iba más que ebrio y seguramente bajo los efectos de alguna droga» y continúa: «Sólo ver a la policía arremetió con sillas y mesas contra ellos».
La víctima que, según el camarero de la cafeteria que llamó a la policía, llevaba más de tres horas ingiriendo alcohol, molestaba a los clientes y se mostraba violento en todo momento. Tampoco quiso abandonar el local cuando él se lo pidió. Una vez reducido y con claros síntomas de ansiedad, cayó al suelo. Entonces los agentes le sacaron las manillas y lo intentaron reanimar durante más de 30 minutos sin éxito. Cuando llegó la ambulancia del Servicio de Emergencias Médicas (SEM) se lo llevaron hacia el Hospital Clínico.
Por otro lado en Salou murió ayer por la noche otro hombre en circunstancias muy similares al de la víctima de plaza Molina. Alertados por una llamada de emergencia a los Mossos d’Esquadra donde una mujer pedía auxilio, los agentes intervinieron para separarlos y un tiempo después de estar esposado, el hombre perdió la conciencia, motivo por el cual los agentes y efectivos del SEM iniciaron la reanimación, pero el hombre murió.
Según el comunicado oficial de los Mossos d’Esquadra, el director general de la policía ha ordenado a la División de Asuntos Internos la apertura de una información reservada a raíz de estos hechos.
