El abogado del diablo

Un SMS reproducido por 'El Mundo' demuestra que Mauricio Casals era el buzón a través del cual Bárcenas hacía llegar sus mensajes confidenciales a Mariano Rajoy
Mauricio Casals
Mauricio Casals

Los periodistas no tenemos que hablar nunca en primera persona. Pero en esta ocasión me permitiré esta licencia para abordar la figura del abogado Mauricio Casals, actual presidente-editor del diario La Razón y consejero adjunto a la presidencia de Atresmedia (la empresa que gestiona Antena 3, La Sexta, Onda Cero…).

Mauricio Casals ha saltado a las primeras páginas de la actualidad informativa después de que el diario El Mundo publicara que, durante meses, ha ido actuando como intermediario en las negociaciones secretas entre el extresorero del PP, Luis Bárcenas, y la Moncloa. Un revelador SMS reproducido por El Mundo en su edición del pasado lunes demuestra que Mauricio Casals era el buzón a través del cual Luis Bárcenas hacía llegar sus mensajes confidenciales al entorno más inmediato de Mariano Rajoy.

Gracias al contenido de este SMS se infiere que tanto la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, como Javier Arenas mintieron en sus comparecencias ante el magistrado Pablo Ruz, el pasado mes de agosto. Y esto es grave, porque los dos iban a la Audiencia Nacional como testigos y, en consecuencia, estaban obligados a declarar la verdad.

De la censura a los trapicheos
Yo conozco al abogado Mauricio Casals desde el lejano 1985. Con mis compañeros periodistas Siscu Baiges y Enric González escribimos el libro Banca Catalana: más que un banco, más que una crisis, un trabajo de investigación sobre la quiebra del grupo financiero dirigido por Jordi Pujol, entonces presidente de la Generalitat. La editorial Plaza & Janés, antes de su publicación, sometió el manuscrito al escrutinio de este abogado, con el cual los autores mantuvimos largas y tenses reuniones. En síntesis, y apelando a posibles riesgos de futuras demandas judiciales, nos sometió a largos interrogatorios sobre nuestras fuentes y sacrificó varios y jugosos pasajes del libro. Vaya, una censura en toda regla.

Con el paso de los años me he vuelto a encontrar casualmente con Mauricio Casals en varias ocasiones. La última, hace unos meses, en el hall del hotel Palace de Madrid. Resulta, según me informaron, que el presidente-editor de La Razón tiene en este céntrico hotel, a cuatro pasos de las Cortes, un despacho permanente a su disposición, donde desarrolla todo tipo de encuentros, como reuniones con políticos, influyentes empresarios y clientes anunciantes de los medios de comunicación de José Manuel Lara. El abogado Casals pasa aquí buena parte de su tiempo, que dedica a las martingalas más variadas.

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