¿Hay desnutrición infantil en Catalunya?
Cuando hablamos de este tema, siempre me gusta decir que a la Cruz Roja, en el observatorio de vulnerabilidad, observamos la situación de nuestros usuarios. Es decir, no estamos hablando de un colectivo o población en general, por lo tanto seria muy osado decir si hay desnutrición o no en Catalunya. Nosotros nos basamos en los datos de nuestros estudios, donde sí detectamos que empezamos a tener problemas en cuanto a la alimentación saludable de los niños. Niños que viven en situaciones familiares donde no hay dinero para asumir gastos básicos, como la vivienda o el material escolar, uno de los problemas que tienen es la alimentación. Por lo tanto, no sé si se podría decir que hay desnutrición en Catalunya, pero sí que en los colectivos que atiende la Cruz Roja hay niños a los cuales se tiene que poder garantizarlos una alimentación saludable.
¿Cómo trabaja la Cruz Roja con estos niños?
Básicamente en dos vías. Las ayudas directas para la alimentación y las indirectas. Si nosotros ayudamos a una familia con un kit de alimentación básico o de higiene personal, es dinero que esta familia podrá destinar a aquello que tenga más prioridad, como pagar la hipoteca, el alquiler del piso o contribuir a una alimentación saludable. Paralelamente, la Cruz Roja va poniendo en marcha proyectos, como el de este verano destinado a la alimentación infantil, para garantizar que aquellos niños que durante el curso han disfrutado de una beca comedor en la escuela, en los meses de verano tengan garantizada esta alimentación saludable al día. Este verano se ha podido ayudar a 1.100 niños.
¿Consideráis que es un trabajo que os corresponde a vosotros o tendría que ser la administración quien diera solución a estos problemas?
Esta es una pregunta histórica. La Cruz Roja va allá donde identifica un problema. Siempre que la Cruz Roja hace algún tipo de ayuda, está claro que es porque no llega la administración pública. En un momento como el de ahora de crisis, no se puede decir que la administración no hace nada. Hace mucho y seguramente mucho más de lo que se ve, pero no llega a todo. Esto no quiere decir que nos tengamos que callar los problemas que hay. Nosotros decimos en todas partes lo que está pasando. Eso sí, nos encantaría desaparecer. Hay un mensaje muy claro: ojalá no existiera la Cruz Roja. Pero, desgraciadamente, existimos, y no sólo la Cruz Roja, también otras entidades que intentan en momentos así paliar el problema, que no sólo es culpa de la administración pública, porque el principal problema es que no hay trabajo y parte de la culpa la tienen las empresas.
En general, ¿cuál es el perfil de personas que atendéis?
El perfil tipo, que ha variado muy poco a lo largo de los estudios, si sacamos a las personas mayores, son gente de 40-50 años con cargas familiares, el problema de los cuales no es sólo que ahora no tienen trabajo, también las dificultades que tendrán para encontrarlo cuando se reactive el mercado laboral, porque arrastrarán deudas económicas y tendrán muy complicado reincorporarse al mercado laboral. También hemos registrado un aumento de familias monoparentales. Y el tema de la gente mayor, que no les dejamos de lado y que continúan siendo una de nuestras prioridades.
Acostumbramos a hacer una pregunta abierta en los estudios sobre que necesita la gente y la mayoría responde que trabajo. Uno de los temas importantísimos es la reactivación del mercado laboral. La gente te lo dice, lo que quieren es un trabajo para volver a ser autónomos, para tener sus gastos cubiertos.
