La consejera de la Presidencia, Laura Vilagrà, ha afirmado este miércoles que la decisión de vetar como representantes de la Generalitat en la mesa de diálogo a personas que no forman parte del gobierno catalán ha sido del presidente Pere Aragonès, y no de la Moncloa, lo contrario de lo que han apuntado el vicepresidente Jordi Puigneró y el dirigente de Junts Jordi Sànchez.
En una entrevista en RAC1, Puigneró ha manifestado «una intuición», citando «conversaciones que hemos tenido», según la cual este veto, que ha impide al propio Sànchez y a Jordi Turull asistir a la mesa, lo ha impuesto «el gobierno del Estado «. Vilagrà, sin embargo, ha negado categóricamente en Cataluña Radio no sólo que el ejecutivo central vetara los nombres que ha propuesto Junts, sino también que los conociera.
Puigneró, por otra parte, ha negado que peligre la continuidad del gobierno coalición de ERC y Junts, y ha rechazado hablar de crisis. El vicepresidente catalán considera que se trata más bien de una «tensión» y ha asegurado que «estamos dando los pasos para que sea reconducible». Además, ha reconocido que «tenemos tensiones» y prevé que «tendremos más». «Si alguien piensa que el conflicto se podrá resolver sin JxCat, va mal encaminado», ha afirmado, eso sí, sobre la mesa de diálogo.
Por otra parte, mientras que Vilagrà ha defendido que el presidente Aragonès «lidera la mesa» y tiene que «poder establecer unas mínimas condiciones», Puigneró ha reiterado la versión de Junts, según la cual no habían alcanzado ningún acuerdo ni verbal ni escrito para que la mesa de diálogo con el gobierno español fuera «de gobierno a gobierno», sin figuras externas, la fórmula remarcada por Aragonès.
