El expresidente de la Generalitat de Catalunya, Artur Mas, ha afirmado que la Operación Cataluña quería acabar con él, el expresidente Jordi Pujol, Xavier Trias y Sandro Rosell. En una entrevista en Ser Catalunya, ha señalado que a partir de 2012 se intentó ir en contra el presidente de la Generalitat, el alcalde de Barcelona y el presidente del Barça. «Aquí está el triángulo», ha añadido. Para Mas, las nuevas informaciones que se han conocido hoy no aportan una novedad, ha asegurado que «hace años que lo sabemos y lo sufrimos», y ha dicho que «el montaje no podía hacerse al margen de toda la cúpula del gobierno español».
En cuanto al debate sobre la inmigración, Mas ha negado que Junts tenga un discurso populista con esta cuestión, y ha avisado de que negarse a hacer este debate es un «error». «Si los países esconden la cabeza bajo el ala, ocurre lo que pasa». Además, ha señalado que Junts «no está comprando el discurso de Silvia Orriols, lo está combatiendo. No está mirando hacia otro lado y del tema debe hablarse».
Mas ha defendido que los partidos independentistas deben «hacer los deberes» a Cataluña durante los meses que quedan hasta las próximas elecciones al Parlament «para que todo esto vuelva a ser creíble», y ha alertado de que si estos partidos no siguen sumando mayoría en el parlamento catalán después de los comicios los propios catalanes habrán dicho que «hay que pasar página». Por otro lado, el expresidente también ha defendido que se aproveche «la oportunidad histórica» en Madrid para que Cataluña pueda gestionar sus impuestos. «Para que el País Vasco tenga concierto económico, España no se ha destruido», ha argumentado.
