El 2024 “tiene que ser el año” en que se tiene que “acordar una financiación singular” para Cataluña y en que se tiene que abrir “la segunda fase de negociación con el Estado”, la del referéndum. En estos términos se ha expresado el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, en su mensaje institucional de Navidad, en que también ha defendido que la ley de amnistía se tiene que aprobar y “aplicar plenamente” para permitir el retorno de los exiliados.
“2024 tiene que ser el año en que la ley de amnistía se aprueba, se aplica plenamente y permite recuperar la libertad y el retorno a Cataluña de las personas represaliadas por su compromiso con el referéndum”, ha considerado Aragonès, que también ha añadido que “tiene que ser el año en que abordemos la segunda fase del proceso de negociación con el Estado, donde Cataluña tiene que poder decidir libremente su futuro”.
Del mismo modo, el presidente de la Generalitat ha situado como prioridad para el año que viene el acuerdo de una “financiación singular” para Cataluña “que ponga fin a un déficit fiscal insoportable que nos priva de destinar los recursos que ya pagamos a mejorar la sanidad, fortalecer la educación, ayudar a autónomos, trabajadores y emprendedores o a las personas con dependencia, y luchar contra las violencias machistas”.
Para conseguir desplegar estas políticas, ha sostenido Aragonès, hay que “utilizar todas las herramientas”, como por ejemplo los presupuestos de la Generalitat para 2024, que todavía no se han aprobado en Consejo Ejecutivo. Según el dirigente republicano, las nuevas cuentas son “imprescindibles para continuar avanzando”, por eso ha reclamado “el compromiso de una mayoría del Parlamento” y se ha mostrado “decidido a construirla».
Aragonès, que ha defendido los frutos del diálogo con el gobierno central, también ha pedido “responsabilidad” a los grupos parlamentarios para aprobar los presupuestos de 2024 y poder abordar “retos” como la sequía o la educación. “Tengo el convencimiento de que todos estaremos a la altura”, ha afirmado.
