Los grupos del PSC-Units, ERC, Junts y En Comú Podem han registrado una proposición de ley en el Parlamento de Cataluña para que los delitos graves de pederastia con penas superiores a 5 años no prescriban. Los grupos han registrado el texto este martes, con el objetivo que de que la Mesa lo acepte -los próximos días- y se apruebe en la cámara catalana en 2024. Posteriormente, el Parlament enviará el texto al Congreso de los Diputados para que la proposición de ley -de carácter no retroactivo- sea tomada en consideración, y se modifique el Código Penal.
Asociaciones de víctimas se han encontrado esta mañana con los grupos proponentes, entre las cuales había la Fundación Vicki Bernadet, que trabaja por la atención integral, prevención, formación y sensibilización de los abusos sexuales infantiles.
El cuerpo de la proposición de ley se centra en la imprescriptibilidad de los abusos sexuales a menores de edad. El objetivo de los grupos es que la cámara catalana apruebe el texto y que, a posteriori, el Parlament envíe al Congreso lo antes posible la petición para que la cámara baja española pueda tomar en consideración la proposición de ley. Así, el paso final es reformar el Código Penal.
El presidente del gobierno central, Pedro Sánchez, ya hizo mención de la importancia de la imprescriptibilidad de estos abusos a menores de edad, durante su discurso de investidura, en noviembre: «Reforzaremos el marco jurídico para que los delitos de agresión y abusos sexuales a menores no estén limitados a un momento concreto y la responsabilidad civil no prescriba», aseguró la entonces candidato del PSOE.
Estas palabras de Sánchez han acelerado las conversaciones y negociaciones de los grupos en el Parlament, de donde finalmente la CUP se descolgó. El texto de la proposición de ley ya estaba bastante cerrado a finales de la semana pasada, tal como confirmaron fuentes parlamentarias a la ACN, y en las últimas horas se han cerrado los últimos flecos.
Según el artículo 183 del Código Penal, quien realice actos de carácter sexual con un menor de 16 años será castigado como responsable de abuso sexual a un menor con la pena de prisión de dos a seis años. Ahora mismo los delitos sexuales que prescriben al cabo de diez años son los que reciben una pena máxima de entre 5 y 10 años de prisión. Así, cualquier delito grave de pederastia ya ha prescrito al cabo de diez años.
La Comisión de Investigación sobre la Pederastia en la Iglesia del Parlamento de Cataluña ya previó, el 2 de octubre, que los grupos impulsarían esta proposición de ley. La presidenta del órgano, Susanna Segovia (comunes), afirmó entonces que el objetivo era que «no haya una fecha de caducidad» por esta tipología de hechos.
La diputada de En Comú Podem argumentó que hace falta que, cuando llegue el momento en que una víctima esté preparada para denunciar, no se encuentre con ningún impedimento. Esta es una petición largamente reivindicada desde las asociaciones de víctimas y plataformas de infancia, dado que sufrir agresiones sexuales durante la infancia puede causar graves secuelas.
El 85% de las víctimas no pide ayuda hasta la edad adulta
El 85% de las víctimas de abuso sexual infantil no pide ayuda hasta la edad adulta, según datos de la Fundación Vicki Bernadet. La entidad presentó el 20 de noviembre una campaña para visibilizar la carga emocional que sufren las víctimas a lo largo de la vida. «Vas haciendo vida cotidiana, pero la carga emocional la tienes», insistió la misma Bernadet, presidenta de la fundación y víctima de abuso sexual.
La organización recibió 1.353 nuevas peticiones de asesoramiento en 2022 en Cataluña. De las 334 personas que han hecho terapia a la fundación, el 85% son adultos que vivieron el abuso en su niñez. «Es cuando son adultos que tienen la capacidad de abrir la caja de recuerdos», explicó Bernadet. La campaña tiene el objetivo de animar las víctimas a habla.
La fundación pidió el 12 de junio al Parlamento más formación para detectar y frenar los abusos a menores. «La prevención tiene que ser curricular», reivindicó la presidenta de la entidad, en una comparecencia en la cámara catalana. Ante los grupos, la entidad exigió unas instituciones públicas «estables» y con profesionales «muy formados», un perfil que aseguren que los cuesta de encontrar.
«Necesitamos hacer entender que trabajar con infancia pide una responsabilidad extra: cuidado y protección», aseguró a su vez la psicóloga Pilar Polo. A parte, la entidad alertó de la cantidad de casos de abuso entre menores y ha reclamado un protocolo diferente para estos. Así mismo, Bernadet ya pidió entonces acabar con la prescripción de los casos. La propuesta se inspira en otros países como Francia y Portugal.
