El hasta ahora líder del grupo municipal de Esquerra Republicana en el Ayuntamiento Barcelona, Ernest Maragall, anunció el viernes por sorpresa que dejaba el consistorio y abandonaba la primera línea de la política municipal. A nadie le sorprendió que lo dejara, dada su larga trayectoria, su edad y el fracaso en el resultado electoral de las últimas elecciones. Pero se da la circunstancia de que Maragall se cansó de repetir, día sí y día también, y en cada entrevista, durante la campaña electoral que se estaría cuatro años en el Ayuntamiento pasara lo que ocurriera en las elecciones. Su decisión de plegar, pues, supone la constatación que mintió descaradamente a los barceloneses y, como ya apuntaban los rumores, tenía la intención de abandonar poco después del inicio del mandato.
Empieza la guerra en ERC de Barcelona. Tras sufrir el congreso más dividido de los últimos años, la marcha de Ernest Maragall es el pistoletazo de salida a la batalla por su sucesión. Primero, se tendrá que decidir quién se queda con el liderazgo del grupo municipal, y después tendrán que luchar por si esa misma persona u otra fuera del consistorio será la cara visible y quien, previsiblemente, será el próximo alcaldable de ERC .
