El Ayuntamiento de Barcelona ha detectado 269 incumplimientos contractuales por parte de empresas adjudicatarias de la limpieza de la capital catalana, a las que reclama 294.800 euros.
Estos casos de irregularidades registrados corresponden a julio y agosto y son el resultado de las 3.500 inspecciones efectuadas sobre estos servicios, que el nuevo gobierno municipal, encabezado por el alcalde Jaume Collboni, anunció hace dos meses que triplicaría.
Las inspecciones forman parte del Plan Endreça con el que Collboni ha querido dar un giro en materia de seguridad y orden al espacio público. Los tenientes de alcaldía Laia Bonet y Albert Batlle han evaluado muy positivamente este jueves la puesta en marcha del plan.
Bonet ha considerado que el descenso de los incumplimientos durante agosto respecto a julio resulta de que «el mensaje caló y se tradujo en un mejor servicio de las empresas», según declaraciones recogidas por Betevé.
170 de los 269 incumplimientos detectados corresponden a las labores de limpieza, y los 99 restantes, a contenedores desbordados. De los incumplimientos sobre la limpieza, los equipos no encontrados donde deberían estar trabajando suponen el 35%, el mismo porcentaje que constituyen los casos de falta de personal respecto a lo establecido, y el 30% restante corresponde a cambios de la limpieza respecto a lo planificado.
Por otra parte, el consistorio ha informado que este año la Guardia Urbana ha impuesto un 36% más de sanciones por consumo de alcohol, un 19% más por orinar o defecar en la vía pública, un 96% más por pintadas y un 24% más por tirar residuos en la calle que el verano anterior.
