Siete diputados tienen en sus manos impedir que la coalición PP-Vox acceda a gobernar a España. Se llaman Míriam Nogueras, Pilar Calvo, Eduard Pujol, Marta Madrenas, Josep Maria Cervera, Isidre Gavín y Josep Maria Cruset. Bastaría con que dos de ellos votaran a favor de la investidura del socialista Pedro Sánchez como presidente del gobierno para evitarlo. Si todos ellos se abstienen o votan en contra de su investidura habrá que ir a unas nuevas elecciones generales, abriendo la puerta a que la extrema derecha gobierne España o condicione las decisiones de un ejecutivo presidido por Alberto Núñez Feijóo.
Estos siete diputados, como todo el mundo, han visto lo que han hecho los gobiernos basados en mayorías formadas por PP y Vox en comunidades autónomas y poblaciones donde mandan a raíz de las elecciones del pasado mes de mayo. En pocos días y semanas han eliminado el sistema educativo en catalán en las Baleares y suprimido la Oficina de Derechos Lingüísticos en la Comunidad Valenciana y la Dirección General de Política Lingüística en Aragón.
Les ha faltado tiempo para correr a eliminar el nombre de Vicent Torrent, fundador del grupo musical Al Tall, del Auditorio municipal de esta ciudad. El concejal de Cultura de Burriana, Jesús Albiol, de Vox, pretendió eliminar las suscripciones municipales a revistas en catalán y lo anunció diciendo que «no somos catalanes de segunda, somos valencianos y españoles de primera». Las manifestaciones de protesta, con una gran participación, le obligaron a dar marcha atrás. Varios grupos de música en catalán han denunciado que los ayuntamientos gobernados por la derecha y la extrema derecha les han suspendido contratos. En las Baleares se prepara la segregación de aulas en función del idioma. El catalán dejará de ser la lengua vehicular en ocho comarcas de la Comunidad Valenciana. En Aragón se ha eliminado las ayudas a las entidades que defienden el uso y el aprendizaje del catalán en La Franja.
La Assemblea Nacional Catalana o los humoristas de TV3, salvo Toni Soler, alineado con ERC, presionan para que los siete diputados de Junts pongan una alfombra roja a las aspiraciones de PP y Vox de hacerse con la presidencia del gobierno de España e impongan a nivel de España las mismas medidas que están aprobado en las comunidades autónomas y ayuntamientos donde gobiernan.
Primero fueron por el catalán en las Baleares, pero no dije nada porque yo no era balear; después fueron por el catalán en Valencia, pero no dije nada porque yo no era valenciano; después fueron por el catalán en Aragón, pero no dije nada porque yo no era aragonés. Cuando vinieron por el catalán en Catalunya, estaba solo.
Y vendrán, si pueden. Lo sabemos todos y todas. También Míriam Nogueras, Pilar Calvo, Eduard Pujol, Marta Madrenas, Josep Maria Cervera, Isidre Gavín y Josep Maria Cruset.
