El director de la Agencia Catalana del Agua (ACA), Samuel Reyes, no se inclina por realizar cortes de agua en el actual contexto de sequía, que les ha llevado a declarar la emergencia en 22 municipios Alt Empordà (Girona) y dos del Baix Camp (Tarragona). Así lo ha afirmado en una entrevista en Catalunya Ràdio, y ha recordado que cuando se entra en emergencia todavía hay margen de meses con el agua garantizada. Asimismo, ha reclamado que se pueda sancionar a los municipios que gastan más agua de la que corresponde, y apela también a la responsabilidad individual en el consumo de agua.
Además, Reyes ha indicado que la sobredotación de Peralada (Girona), la población que más consume del acuífero Fluvià-Muga -que entra en emergencia-, equivale al consumo de los 30 municipios más pequeños de Cataluña. Está previsto que 22 municipios de la comarca del Alt Empordà, que dependen de este acuífero, y dos de la comarca del Baix Camp que se abastecen del agua del pantano de Riudecanyes, entren en emergencia la próxima semana, cuando se publique de forma oficial la declaración que anunció este martes la ACA.
Para reducir los consumos, el director de la ACA también ha rechazado encarecer el precio del agua en un primer tramo, porque, ha recordado, debe tener un precio asequible. Reyes ha vuelto a hacer un llamamiento a mantener un uso responsable del agua, y ha pedido a los partidos políticos que «tengan memoria» a la hora de criticar al Gobierno catalán o tomar decisiones, y que pongan el agua en primera línea por «priorizarla» y no por «politizarla».
