La Sindicatura de Cuentas ha encontrado diversas irregularidades en las retribuciones de varios altos cargos del Ayuntamiento de Barcelona en 2020, difunde la Agència Catalana de Notícies (ACN).
En un informe, la Sindicatura ha reflejado que en las retribuciones de algunas personas se incluyeron conceptos que no habían sido legalmente acordados, como un premio de antigüedad y el pago de las prestaciones obligatorias con cargo a la Seguridad Social hasta llegar al 100% de las retribuciones fijas y periódicas de ocho personas de baja temporal por incapacidad.
La Sindicatura, además, asegura que la determinación de los importes del complemento personal transitorio incluido en la retribución de cinco gerentes «no se ajustó a derecho», y que se calcularon los trienios de los funcionarios propios de forma indebida.
El número de personas objeto de la fiscalización ha sido 118, incluidos 43 concejales del Consejo Municipal, 40 de los 199 consejeros de distrito que tuvo el Ayuntamiento durante 2020, 7 comisionados, 27 gerentes, y la Síndica de Greuges (defensora del pueblo) municipal.
Precisamente, el informe de 2020 es crítico con la figura del Síndic de Greuges municipal, que no está incluida en el Código ético y de conducta del Ayuntamiento, y está regulada como personal eventual, algo que la Sindicatura no considera correcto. Tampoco se publicó la retribución percibida por la Síndica, según la misma información.
