El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha asegurado este lunes que el voto de los cuatro regidores del PP en Barcelona en favor de la investidura del socialista Jaume Collboni es una maniobra de sentido de Estado dónde «en realidad ha ganado España». Según Feijóo, el objetivo del PP ha sido que «España vuelva a la centralidad rompa de una vez la política de bloques donde nos han querido instalar en todos». «Lo hemos hecho en todas partes, también en Barcelona y Vitoria, sin seguir otros intereses que el sentido de Estado y sin pedir nada a cambio para defender este sentido de Estado», ha dicho en un almuerzo informativo a Madrid.
Núñez Feijóo ha querido disociar la elección del candidato del PSC en Barcelona de la situación del PSOE en España, porque a diferencia de Jaume Collboni el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, «está dispuesto a continuar siendo presidente con los votos de los independentistas». Según ha explicado, el primer planteamiento del PP después de las elecciones del 28-M en Barcelona «fue hablar con el PSOE». «Llamamos a su secretario de organización y le dijimos que estábamos dispuestos a facilitar un gobierno del PSC siempre que no tuviera como socio un partido soberanista y populista como los comunes». Según Feijóo, «sorprendentemente nos dijeron que esto no lo llevaban ellos, que habláramos con el PSC», y el PP lo hizo.
El presidente del PP ha presentado también en esta conferencia un decálogo de medidas que adoptará si llega a la Moncloa. Pasa por una reducción de ministerios y una auditoría de la administración. También una rebaja de impuestos, empezando por el IRPF a las rentas medianas y bajas. Además ha prometido que las primeras leyes serán para recuperar los delitos de sedición y un aumento de las penas por corrupción, y remitirá en el Congreso una nueva ley del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) para garantizar «la independencia» de los jueces, magistrados y fiscales.
Feijóo también ha afirmado que la «lucha por la igualdad y contra la violencia de género» será «una política transversal y alejada del partidismo», y llamará a los agentes sociales. También una revisión «una a una» de las leyes donde el voto de Bildu ha sido decisivo. Igualmente, ha prometido que convocará una conferencia de presidentes para fijar un calendario de trabajo sobre fondos europeos, políticas de agua y financiación autonómica, y situará como prioridad de Estado la presidencia española del Consejo Europeo.
