Este lunes un grupo de técnicos ha entrado por primera vez en las criptas de Cuelgamuros, el antiguo Valle de los Caídos, para exhumar 130 cuerpos de víctimas del franquismo. Lo ha avanzado El País.
Se trata de una operación impulsada por el gobierno español para hacer cumplir la ley de memoria democrática. La portavoz del ejecutivo, Isabel Rodríguez, celebra que se pueda dar respuesta a las familias llevan 20 años reclamando la exhumación de los cuerpos.
Los especialistas, médicos, científicos y arqueólogos, han instalado un laboratorio forense en el interior de la basílica para trabajar con garantías. Miembros de la policía científica identificarán las cajas en las que reposan los restos de las víctimas para obtener huesos y extraer el ADN.
Tal y como ocurrió con la exhumación de la tumba de Francisco Franco, en el 2019, el proceso para entrar en Cuelgamuros había sido detenido en los juzgados durante meses a causa de las trabas que ponían grupos franquistas y también la alcaldesa de San Lorenzo de El Escorial, Carlota López, del PP, que se negaba a autorizar las obras.
El Tribunal Supremo, hace dos meses, rechazó el recurso de la Fundación Francisco Franco para evitar la entrada de los técnicos, y ahora la Asociación por la Defensa del Valle de los Caídos amenaza con querellarse por profanación.
