Los derechos de los niños quedan invisibilizados durante la campaña electoral. Esta es una de las reflexiones de la presidenta de la Federació de Entitats d’Atenció i d’Educació a la Infància i a l’Adolescència (FEDAIA), Elisenda Xifre, en declaraciones a EL TRIANGLE. La entidad reclama a las formaciones políticas que se presenten a las elecciones municipales del 28 de mayo que pongan en el centro de sus políticas la infancia, la adolescencia y la juventud, y todavía más, si esta población vive situaciones de vulnerabilidad.
En Cataluña, tres de cada diez niños vive en situación de pobreza y, según Elisenda Xifre, “es muy grave que no se hable de esta realidad, cuando se pueden hacer muchas acciones desde los municipios”. “Durante la pandemia, ya se evidenció que tenemos una sociedad excesivamente adultocéntrica y, por lo tanto, la mirada de la infancia pocas veces se tiene en cuenta y pocas veces les dan los espacios adecuados para tener voz”, añade la presidenta de la FEDAIA.
Si esta mirada no se incorpora por parte de los futuros gobiernos municipales, se corre el riesgo de cronificar situaciones de vulnerabilidad de niños y adolescentes, y de no disponer de municipios inclusivos que favorezcan una red relacional y social que evite situaciones de exclusión social.
Programas electorales
Si se hace un repaso de los programas electorales de las formaciones que se presentan en el Ayuntamiento de Barcelona, se puede comprobar que la infancia en riesgo no es un eje central de actuación política. Las palabras “infancia en riesgo” solo salen en el programa de Barcelona en comú, pero vinculadas a la nueva ley estatal de protección integral de la infancia y la adolescencia contra las violencias. Otras formaciones, como Vox, no citan ni una vez la palabra “pobreza” en su programa. Sí que es cierto que la mayoría de las candidaturas por Barcelona aborden políticas de infancia, como serien mejorar las ayudas del Fondo Infancia 0-16 años, e incluyen frases promesa como: “Barcelona, la ciudad amiga de la infancia” o bien “Barcelona, contra la pobreza infantil”.
Desgraciadamente, estas afirmaciones se quedan cortas para la FEDAIA, porque hay realidades que son invisibles para las candidaturas, como es la situación que viven los jóvenes extutelados por parte de la Generalitat en nuestros pueblos y ciudades. “Estos jóvenes que están en situación de extutelados viven en un municipio concreto, y en este punto, como cualquier otra persona, hace actividades en el ámbito laboral, social, de ocio o deportivo. Y hay que incorporar a las políticas municipales la perspectiva de la cohesión social para que esta juventud tenga red propia o bien acompañamiento para hacer red social”.
En materia de vivienda, Elisenda Xifre también lamenta que la mirada de la infancia no se incluya en este reto social. Disponer del Fondo Infancia 0-16, que da lugar a una prestación social de urgencia para familias con menores de 16 años, es una acción positiva, pero, por Xifre, “tiene que ir acompañada otras políticas, como las de vivienda”. La presidenta de la FEDAIA añade que “poder garantizar una vivienda en condiciones dignas para toda la infancia no está en campaña. No se le da una perspectiva de infancia, y para un niño o una niña es muy importante tener un espacio de vida y de seguridad. A un niño o una niña vivir en una habitación en un piso compartido con otras familias puede generarle inseguridad. Aparte, le limita la privacidad, el espacio reservado de estudio o bien un espacio de juego”. Las políticas de vivienda sí que son un eje central de la campaña, pero hay que ver como se garantiza un espacio de vida adecuado a las familias con niños a cargo.
En relación con el servicio de canguratge público, todas las formaciones citan su importancia, menos Vox y Valents, que no dicen ni una palabra. En cuanto al resto, los hay que condicionan el servicio a la renta disponible de la familia, como Xavier Trias, u otros como Ada Colau lo ofrecen con criterio universal con tarificación social. Jaume Collboni, por su parte, vincula este servicio de canguratge a facilitar que las mujeres que quieren incorporarse al mercado laboral tengan este apoyo, mientras que la cupaire Basha Changue lo define como un espacio de apoyo a la maternidad y la paternidad abierto a toda la ciudadanía.
Para la FEDAIA, facilitar este servicio con la única mirada de la conciliación es insuficiente, y haría falta que las familias vulnerables con niños a cargo pudieran recibir este canguratge como un servicio socioeducativo. Esto querría decir que no es solo un servicio de acogida, sino un espacio “donde hay una acción educativa de carácter preventivo para trabajar con las familias para que la situación de riesgo no vaya además. Trabajar con lógica preventiva y comunitaria es clave para detectar situaciones de riesgo en la infancia. Hay que desplegar con garantías estas políticas en el ámbito municipal”.
