La sequía obligará a los campesinos del Delta de l’Ebre a empezar la campaña del arroz con la mitad de dotación de agua de riego de la que es habitual. La Confederació Hidrogràfica de l’Ebre (CHE) ha trasladado formalmente la decisión del recorte a las comunidades de regantes de la Esquerra y la Dreta, que ya trabajan para ajustarse al nuevo escenario buscando fórmulas para poder sacar adelante el cultivo.
Por el momento, la de la Esquerra mantiene los planes para abrir el agua del canal el próximo día 28. Por su parte, la Comunitat de la Dreta, que preveía abrir el agua estos días, fijará una nueva fecha en función de las medidas que se estudien. «Con la mitad del agua, sólo llegaríamos al mes de junio», ha alertado su presidente, Manel Ferré.
La Junta de Govern de la Comunitat de Regants la Dreta de l’Ebre se reunirá este viernes por la mañana para analizar la situación y buscar soluciones en el complejo e insólito escenario que plantea la decisión de la CHE.
La de la Esquerra ya realizó este miércoles la Junta de Govern y han creado una comisión para gestionar la sequía. Este jueves por la mañana también se han reunido con las cooperativas, sindicatos y arroceros y este jueves por la tarde lo harán con los pescadores, acuicultores y cazadores. El próximo miércoles harán una asamblea general para contar a los comuneros «una situación que es inédita en el Delta de l’Ebre para el sector del arroz», como ha remarcado el presidente de la Comunitat de Regants de l’Esquerra, Javier Casanova.
Lo que preocupa especialmente del recorte de la concesión es que no garantiza agua «hasta el final del ciclo de la planta». En el contexto de sequía más agravado, los regantes del Delta se quedarían con los canales vacíos entre el 1 de julio y el 1 de agosto porque la concesión sólo está «garantizada hasta la mitad del ciclo del arroz». Éste es el problema», ha subrayado el presidente de la Esquerra.
